A menos de 30 minutos de la capital Winnipeg nos encontramos con una de las joyas de la zona rural de Manitoba: un pueblo llamado St-Pierre-Jolys. Manitoba es una de las provincias canadienses y Winnipeg su capital y ciudad con mayor número de habitantes.
A lo largo del pintoresco río Rat River surge esta pequeña población que representa un estilo de vida tranquilo, sin prisas y rural. Aquí todavía se conocen todos sus habitantes, se saludan, y se ayudan unos a otros siempre con una sonrisa en la boca.
Sin embargo existe en la comunidad quien piensa de manera diferente, quien ve una oportunidad antes de que ésta se presente, y quien, de forma anticonvencional, quiere crear algo nuevo y productivo.
El clima no ayuda, con pocos mese de calor en medio de una larga temporada bajo cero, pero es precisamente por ello que nace la idea de transformar una sencilla tienda de alimentación en algo más, en un punto de referencia cotidiano para toda la comunidad.
Mark Duddridge es el propietario del “Villaggio Market” desde 2009, y a lo largo de estos años ha realizado más de un cambio en el modelo de negocio de su tienda de alimentación, desde la venta de pizza hecha en el “forno a legna”, pasando por el famoso “gelato” al modo italiano, hasta los sandwiches utilizando las mejores materias primas de su tienda. Productos que él mismo se ha encargado de buscar para ofrecer a sus compaisanos lo mejor y más fresco al mejor precio.
Y así es como, siguiendo con su particular enfoque de la vida, ha decidido ampliar el negocio e incluir dentro del market una Farmacia, pero no una cualquiera, sino una ¡farmacia firmada por Sartoretto Verna!
Un concepto único y diferente que cambiará el paisaje y que seguramente convertirá el “Villaggio Market” en el punto de referencia de toda la comunidad.